Ideas para reducir el recibo energético de tu empresa
Si hay un gasto que mantiene ocupados a los propietarios de pequeñas y medianas empresas, es el recibo de servicios públicos, un elemento clave en la cuenta de gastos mensuales. Pero, ¿estamos haciendo todo lo posible para reducir este juego tanto como sea posible? Veamos qué opciones necesitamos para economizar.
¿Sabemos realmente lo que estamos pagando?
En los últimos años, el precio de la factura de la luz ha ido aumentando de forma sostenida, aumentando más de un 80%, según la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC). Estos números sitúan a España como uno de los países con la energía más costosa de Europa.
A pesar del aumento, las empresas no toman las medidas adecuadas para reducir las facturas de electricidad. Según un estudio de más de 1.000 pymes españolas, el 78% de las empresas no atienden su consumo energético. El informe muestra que el 43% de las empresas podrían reducir sus facturas de electricidad entre un 10% y un 23% si tomarán medidas para mejorar la eficiencia.
En nuestra factura de la luz pagamos dos conceptos completamente diferentes:
- Por el consumo eléctrico real
- Por la potencia de luz contratada.
Cuando hablamos de consumo real, nos referimos a los gastos eléctricos que provocan las distintas fuentes de luz, electrodomésticos, máquinas, etc. durante el día. Estos costes pueden variar en función de la tarifa y el costo de la electricidad. Este plazo es variable y lo marca diariamente el mercado, por ejemplo, en el momento de redactar este artículo, los precios de la tarifa general oscilaban entre los 0,2965 €/kWh de mínimo y los 0,4109 €/kWh de máximo, según la hora del día. Estas fluctuaciones en el precio de la electricidad y la existencia de diferentes tipos de tarifas nos llevan a uno de los ahorros que veremos más adelante, el de elegir una tarifa que se adapte a nuestro horario de trabajo.
Energía eléctrica de contrato
En cuanto a la energía eléctrica de contrato, debemos saber que es un concepto fijo que se aplicará incluso si paramos la producción y no consumimos un vatio. Lo que realmente estamos pagando aquí es el servicio que brinda la compañía eléctrica, que establece un límite en la cantidad de energía que pueden consumir varios dispositivos eléctricos al mismo tiempo.
Cómo reducir tu recibo eléctrico
Hemos elaborado una lista de medidas que pueden ayudarte a reducir la factura de la luz de tu empresa, algunas de las cuales no requieren inversión, mientras que otras suponen un desembolso inicial, pero podrás amortizarlas más rápido de lo que piensas, así que al final de su total es para ganar.
- Reducir potencia y ajustar tarifa: Actualmente las empresas eléctricas ofrecen a las Pymes tres rangos de potencia al contratar el servicio eléctrico: potencia menor o igual a 10kW, potencia entre 10kW y 15kW y potencia mayor a 15 kW. El estudio realizado llega a la conclusión de que alrededor del 60% de las empresas podrían ahorrar entre 500 y más de 2.000 euros al mes si redujeran su producción contratada. Antes de aplicar este cambio debemos calcular el coste de los diferentes electrodomésticos y puntos de luz de los que disponemos para ajustar la potencia y así adaptarla a nuestras necesidades. En cuanto a la tarifa, cada tramo de servicio está vinculado a tarifas específicas, entre las que debemos elegir la que mejor se adapte a nuestro plan de trabajo o producción. El cambio de energía eléctrica se puede realizar cada 12 meses e implica el pago de una serie de derechos a las empresas eléctricas. Reducir la potencia nos costaría unos 10€, un pequeño esfuerzo para un gran beneficio.
Sustituir fuentes de luz convencionales por Leds
- Sustitución de todas las fuentes de luz por luces LED: este cambio puede suponer un esfuerzo importante para algunas empresas dependiendo de su tamaño y necesidades, pero los estudios demuestran que el retorno de la inversión es inferior a 4 años. Hoy en día, todo tipo de iluminación tradicional tiene sus equivalentes basados en tecnología LED, mucho más eficientes, con ahorros de hasta un 80% y 50 veces más duraderas que una solución tradicional y casi 10 veces más duraderas que una solución de bajo consumo. Bombillas, tubos, paneles e incluso potentes campanas industriales están disponibles con los beneficios del LED.
Compensación de la energía reactiva
- Instale capacitores para compensar la energía reactiva: La energía reactiva es la energía requerida para crear y mantener los campos magnéticos necesarios para operar varios dispositivos eléctricos como motores, transformadores o lámparas de descarga. La energía reactiva no tiene que generarse, sino transportarse, lo que provoca fluctuaciones en la intensidad de corriente de los circuitos y sobrecargas en las líneas del transformador y del generador. Todo esto hace que las empresas necesiten invertir más en sus instalaciones productivas, tener más capacidad en líneas de distribución y en transformadores para transportar y transformar esa energía.
La energía reactiva
Esto se traduce en costes que se facturan como penalización por energía reactiva. Este control de la energía reactiva se consigue mediante la instalación de baterías de condensadores. Este sistema, que evita que la energía reactiva salga de la red de distribución, cuesta alrededor de 600 euros, tiene una larga vida útil y prácticamente no requiere mantenimiento.
Además del consiguiente ahorro en el recibo eléctrico, con la aplicación de estas medidas también contribuiremos a la protección del ecosistema. Según la investigación realizada, se estima que una sola pyme del sector servicios podría evitar la emisión de 5,79 toneladas de dióxido de carbono al año, mientras que otra pyme del sector industrial reduciría su impacto ambiental en 5,47 toneladas. En la hostelería, una empresa dejará de emitir 3,10 toneladas de dióxido de carbono a la atmósfera, y en el sector agrícola, serán 2,74 toneladas. Ahorro y sostenibilidad, ¿todavía necesitas estudiar tu factura y ajustarla al máximo?